Los glaciares del Ecuador están ubicados en las cordilleras de origen volcánico y están restringidos a los picos más altos. Los glaciares (Antisana, Cotopaxi, Chimborazo, Cayambe, los Ilinizas (norte y sur), El Altar y el Carihuairazo) están limitados a dos cordilleras: la Cordillera Occidental con cuatro glaciares y la Cordillera Oriental con tres glaciares. Su ubicación geográfica es «estratégica» porque recaba «circulación atmosférica del Pacífico» y también «humedad de la Amazonía», así lo explica Rubén Bazantes, glaciólogo de la Universidad Politécnica Nacional del Ecuador. Esta ubicación es clave, ya que provoca fuertes precipitaciones que llegan a 6.000 mm al año y hace que el comportamiento de los glaciares ecuatorianos sea diferente al de otros de la cordillera de los Andes.

Glaciar Cayambe, que cuenta con 8,9 kilómetros cuadrados. Es uno de los lugares favoritos de los excursionistas ecuatorianos para practicar la escalada en hielo. Fuente: Giménez, J. 2019. Los glaciares de Los Andes, en peligro de extinción.

La proliferación de hielo negro o fósil pone en duda la supervivencia de esta lengua glaciar, situada por debajo de los 5.000 metros de altura. Fuente: Giménez, J. 2019. Los glaciares de Los Andes, en peligro de extinción.

La pérdida de volumen en los glaciares de esta región ha sido significativa en las últimas décadas y probablemente continuará sucediendo en el contexto de cambio climático. En la actualidad, Ecuador ha perdido un 50% aproximadamente de la cobertura glaciar de los nevados desde mediados de la década del 50. Según el Ministerio del Ambiente de Ecuador (MAE) en el año 1990 la cobertura de hielo en Ecuador correspondía a 97,2 km2. Siete años más tarde pasó a 60,7 km2, en el 2010 se redujo a 48 km2 y en la actualidad es de aproximadamente 43,5 km2 (según el último Inventario Nacional de los glaciares del Ecuador 2018, presentado en el mismo año ante la sociedad científica Unión Europea de Geociencias).

La amenaza más inminente se cierne sobre los glaciares de «Carihuairazo», en la provincia del Chimborazo, y el «Iliniza sur», entre las provincias de Pichincha y Cotopaxi. En el caso del «Carihuairazo», el 96% de su superficie glaciar se ha derretido en un periodo de 63 años, Actualmente el glaciar comprende una superficie de 30.000 metros cuadrados. Los análisis realizados estiman que este glaciar muy probablemente desaparecerá en los próximos 5 años. En tanto que el «Iliniza sur» no cuenta con una proyección exacta pero el deshielo ha sido también notorio. «Hasta finales de 2018 se registró (a nivel nacional) una pérdida del 53% de cobertura glaciar en promedio», destacó el experto Bolívar Cáceres del Instituto Nacional de Meteorología e Hidrología (INAMHI), quien también advierte que es difícil predecir el futuro de los glaciares porque las condiciones climáticas son aleatorias.

Volcán Carihuairazo. Fuente: Giménez, J. 2019. Los glaciares de Los Andes, en peligro de extinción.

El deshielo es más evidente en los glaciares «Carihuairazo» e «Iliniza sur» porque están ubicados por debajo de la “línea de equilibrio” (límite entre la zona de acumulación y zona de ablación). Esa línea se encuentra a 5.120 metros de altitud, por lo que ambos glaciares están en «estado de pérdida y no existe recuperación», es decir se encuentran en zona de ablación. El «Carihuairazo» está a 5.025 m.s.n.m, y el «Iliniza sur», a 4.750 m.s.n.m.

Glaciar Iliniza Sur. fotografiado desde la cumbre de su gemelo del norte. Fuente: Giménez, J. 2019. Los glaciares de Los Andes, en peligro de extinción.

Impactos

La disminución de la cobertura glaciar causará impactos irremediables sobre el régimen hidrológico de los páramos. En las épocas de estiaje, es decir cuando existe un déficit de lluvia, el agua de los páramos proviene en parte de la fusión de los glaciares. De no existir glaciares, el ecosistema con desarrollo en zonas de gran altitud, perderían esta fuente de regulación hídrica durante los periodos de sequía. Por consiguiente, otra de las consecuencias es la extinción de especies de flora y fauna autóctonas en los páramos ecuatorianos, o la llegada de especies invasoras como consecuencia de un cambio de ecosistema. Otras de las consecuencias es el turismo. Los glaciares andinos son un gran atractivo para los turistas nacionales e internacionales amantes de la naturaleza. Su desaparición podría conllevar la reducción de ingresos de las comunidades aledañas que viven del turismo.

Finalmente, critica es la situación de los glaciares del Ecuador, por lo que revertir los efectos del cambio climático en la disminución de la cobertura glaciar tanto en el Ecuador como en el resto del Planeta es un desafío global, que debe conllevar a la unión y al trabajo en conjunto de todas las partes.

Páramo. Ecosistema de montaña con dominio vegetación de tipo matorral. Fuente: Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD Ecuador). 2019.

Fuentes de información
– UNESCO y GRID-Arenda, 2018. Atlas de Glaciares y Aguas Andinos. El impacto del retroceso de los glaciares sobre los recursos hídricos. Link
– Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo, 2019. Ecuador. Link
– El Tiempo, diario de Cuenca, 2019. «Ecuador podría perder dos de sus siete glaciares». Link
– El comercio, 2020. «Ecuador ha perdido más de la mitad de su cobertura glaciar». Link
– Los glaciares de Los Andes, en peligro de extinción. Link